Siempre hemos oído que la población en España está envejeciendo, que cada vez hay más “viejos”, que casi no nacen niños, que -lo que más preocupa a algunos- no va a haber dinero para pagar las pensiones.

De forma esporádica y recursiva aparece esta noticia en los medios y se lían a dar datos de que en España antes nacían casi 3 hijos por habitante y que ahora estamos en casi uno, pero nunca van más allá, las noticias son las noticias y con asustarte durante 20 o 30 segundos es suficiente, enseguida te ponen un accidente de tráfico o una guerra que asusta mucho mucho más, además, así no te vas corriendo a hacer hijos para que te puedan mantener en el futuro.

Pues como siempre me ha gustado saber el porqué de las cosas un día me puse a buscar y encontré. Encontré y dejé en el cajón, ahí al fondo, como me suele pasar, pero por fin lo he retomado.
Antes de nada me gustaría que por lo menos, si te resulta un rollo esto, te saltes lo del medio y vayas al final del todo, eso creo que SI merece la pena verlo.

Encontré una base de datos de Naciones Unidas que tiene la información de la población de todo el mundo por años. Vamos a suponer que son reales y correctos, o por lo menos igual de buenos o malos para todos los países que he seleccionado.
Empecemos por ver si es verdad eso de que antes nacían más hijos, por lo menos con los datos que tenemos.

Primero ver qué es esa tasa de nacimientos…

Según la Wikipedia, aaah, que gran amiga, casi como nuestro gran hermano Google. Pues eso, según la Wikipedia nada, primero hay que puntualizar, joé que complicado es este mundo.

Hay que saber que hay diversos índices para medir los nacimientos, como en la página que he encontrado indican dos, vamos a quedarnos con esos dos, aunque sepáis que hay más formas de medir estas cosas:

• Tasa de natalidad : número de nacimientos por cada mil habitantes en un año
  
• Índice de fecundidad: número medio de hijos por mujer
  

Bien, pues para hacernos una idea, aquí tenéis los datos del 2015. Este tipo de datos son los usados en el grafico que hay un poco más abajo.




Nos vamos a quedar con el número de nacimientos por cada 1000 habitantes (tasa de natalidad) porque en el fondo lo que nos interesa es saber cómo evolucionan los nacimientos en función de los que “queremos” cobrar la pensión. Aquí está el gráfico de la tasa de natalidad a lo largo de los años.




Para los que seáis un poco curiosos, os dejo también el grafico sobre el índice de fecundidad (número medio de hijos por mujer) se puede ver que más o menos van a la par.




Como se puede ver en estos gráficos, cada vez hay menos nacimientos, lo que se traduce en que cada vez la media de edad de la población será mayor. Si el número de nacimientos se estabilizase y el número de muertes también, al final tendríamos un equilibrio y no tendríamos por qué preocuparnos, pero el problema es que venimos de un periodo con muchos nacimientos y en las últimas décadas ha disminuido. También ha disminuido el número de fallecimientos debido a los avances de la medicina y a la mejora de las condiciones de vida y estamos ahí, en la transición.

Vamos a lo que realmente nos interesa, las pensiones. ¿Qué pasará con nuestras pensiones? Pues nada mejor que ver la población en cada rango de edad y hacer cálculos de qué edad tendrá esa población según vayan pasando los años. Si, si, envejecen todos al mismo ritmo, por lo menos para la seguridad social.

Los datos de población que se han cogido indican la población española en rangos de 5 años para el año 2010.




Con estos datos se puede ver la población en edad de trabajar, que consideraremos de 25 a 65 años, y la población en edad de cobrar pensión, que serían los de 65 años en adelante. Así para el año 2010 tendríamos que sumar esos conjuntos:




Ahora ya podemos calcular el número de personas en edad de trabajar respecto al número de personas en edad de cobrar pensión para el año 2010.




Si tomamos los datos de la tabla inicial, la que indica la población por edad, podemos calcular cómo queda el coeficiente anterior según vaya envejeciendo la población. Así el grupo de edad de 25-64 años en el 2015 serán los que en el 2010 tenían 20-59 años y los del grupo de edad 65-100+ años del 2015, serán los que en el 2010 tenían 60-99 años. Nos guardamos esto para más adelante

Ahora hay que ir un paso más allá, ya dije antes que este mundo es muy complicado, hay que tener en cuenta la tasa de mortalidad, es decir que en el transcurso de esos 5 años hay una parte de la población que no comerá las uvas y por tanto no formarán parte de la estadística de los 5 años siguientes. También hay que tener en cuenta que normalmente hay más muertes entre las personas mayores que entre los jóvenes, mira, una cosa que beneficia al asunto.

Para simplificar el tema, he cogido la tasa media de mortalidad de los años 2009, 2010 y 2011.Soy consciente que la tasa variará según pasen los años y variará hacia un contexto más negativo, también es distinta entre hombres y mujeres, pero esto es sólo un estudio para vislumbrar lo que nos espera, no se trata de adivinar lo que realmente va a pasar.




Al parecer ya tenemos toda la información, cogemos la población de 2010, la vamos envejeciendo 5 años y aplicando la tasa de mortalidad para ver cómo estará dicha población 5 años después, repetimos la operación y les volvemos a envejecer 5 años descontando los que se quedan por el camino y vemos cuantos son en el 2020, y así sucesivamente.

También he dejado que pasen a mejor vida todos los que tienen más de 100 años una vez dado el salto de 5 años. Esto es algo que hace más positivo el pronóstico, pero lo asumiremos.
Para facilitar la visión he coloreado los rangos de edad que nos interesan.
Lo que queda es esto:




Pues el dato está claro, pero las cosas siempre se ven mejor en un gráfico.




Está claro, en unos años tendremos un problema muuuuuuuy grande, si ahora cuando hay paga extra tienen que tirar del fondo de garantía de la seguridad social –ha ocurrido en junio de 2016-, cuando lleguemos al 2030 o 2035 no sé lo que va a pasar.

Y pienso yo….. ¿es posible que me haya equivocado?

¡Cachis!, venga, voy a mirar otra fuente.

He ido al INE –Instituto Nacional de Estadística- y he conseguido estos datos que algunos son basados en datos reales y otros son estimados en función de sus estudios, también se supone que son correctos pues para ello se dedican a hacer estudios y estadísticas.

He cogido los datos y he calculado la tasa que nos preocupa.




Esta vez la población trabajadora empezará a los 16 años, pero bueno, nos sirve igualmente para hacernos una idea. Veamos el gráfico:




Si os fijáis ésta gráfica es un poco más catastrofista.

No me queda mucho más que decir, solo, como suele decirse: para muestra, un botón (1)
Y no hay nada mejor que un dibujito que resuma todo este rollo que os he metido.





¿Y qué se puede hacer?

Pues esto nunca se sabe, últimamente hemos hecho un artículo sobre el cálculo de las pensiones para informar a los compañeros en el trabajo y en el proceso de cálculo hay un índice que llaman “factor de sostenibilidad”. Éste índice se aplicará a los pensionistas nuevos a partir del 1 de enero de 2019. Obviamente será un factor reductor que aplicaran para compensar lo que acabamos de anunciar y que, según pase el tiempo, irán haciéndolo más reductor para seguir compensando.

También está claro que esto es un asunto de estado y que tendrán que tomar alguna medida más contundente que la actual: pasar las pensiones con cargo a impuestos, subir el IVA para aplicarlo a las pensiones,… quien sabe, el futuro nos lo aclarará.

Yo, por mi parte, intentaré ir metiendo lo que pueda en un plan de pensiones.

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(1) Para muestra, un botón: Denota que no resulta necesario mostrarlo o enseñarlo todo, ya que de un ejemplo se puede deducir fácilmente todo lo que falta por descubrir.